Autocrítica: ¿por qué lo hacemos y cómo afrontarlo?

¿Alguna vez te has encontrado en una situación en la que fuiste muy crítico contigo mismo? Y se juzgaba duramente a sí mismo, como: “¿Por qué pensé que podía hacer esto?” 

El autocrítico puede ocurrir sin que te des cuenta, a menudo es una reacción a una situación, acciones y sentimientos. Sin embargo, también es un mecanismo de defensa, porque si te juzgas a ti mismo primero, las críticas de los demás no te afectarán tanto. Muchas veces utilizamos este mecanismo por miedo al rechazo y al fracaso¹.

Pero es bueno mantenerse alerta, el autocrítico constante puede generar sentimientos negativos, provocar ansiedad y depresión^1,2. Por lo tanto, los consejos de hoy tienen como objetivo ayudarle a comprender cuándo le está afectando esta “voz” tan crítica y cómo puede afrontarla.

1 - Presta atención al diálogo interno: el primer paso es prestar atención a lo que dices sobre ti mismo. ¿Es cierta esta crítica negativa o no? ¿Juzgarías de la misma manera a alguien cercano a ti? Esta conciencia del diálogo interno es importante³.

2 - Cuidado con las comparaciones: en la era de la tecnología y el dominio de las redes sociales, no compararse es muy difícil. Pero debes tener cuidado y recordar que tu viaje es sólo tuyo y, así como cada individuo es único, también lo es el viaje de la vida^2,3.

3 - No te propongas objetivos inalcanzables: todos tenemos objetivos que queremos alcanzar, pero sabemos fijar objetivos realistas. Parte del autocrítico proviene de sentir insuficiencia, entonces, ¿por qué establecer una meta que te hará sentir que no eres lo suficientemente bueno? Divide tu meta en objetivos más pequeños y celebra cada victoria, los pequeños pasos te llevan a un progreso mayor del que imaginas^2,3

4 - Saber pedir ayuda: pedir ayuda a amigos y personas cercanas, o incluso a un profesional, está lejos de ser una debilidad. Comprende tus límites, habla de tus sentimientos y te darás cuenta de que todos tenemos limitaciones ³. 

Romper el ciclo del autocrítico te llevará a la autoaceptación. Y saber valorar lo bueno de ti traerá beneficios a tu bienestar general. Así que sé más amable contigo mismo.