¿Alguna vez te ha costado alcanzar ciertos objetivos porque no te parecían lo suficientemente claros? ¿Y si te dijéramos que esto podría deberse a que estos objetivos no se alinean con tus valores? Pero ¿cómo sabes si un objetivo se alinea con tus valores? A través de la claridad mental.
La relación entre objetivos y valores personales
Nuestros valores personales son como una brújula que guía nuestras decisiones y cómo priorizamos lo más importante en la vida. Guían nuestras decisiones, nuestros hábitos, nuestros comportamientos, y también nos ayudan a definir qué objetivos son realmente importantes.
En 1990, los investigadores Edwin Locke y Gary Latham publicaron el libro "Una teoría del establecimiento de objetivos y el rendimiento en las tareas", donde explicaron la Teoría del Establecimiento de Objetivos, que define cómo las personas se motivan para alcanzar objetivos basándose en los siguientes cinco principios:
- Claridad: estos objetivos deben ser claros y fáciles de entender1;
- Desafío: los objetivos demasiado desafiantes o insuficientes no son motivadores1;
- Compromiso: la persona debe asumir este objetivo como una tarea a cumplir, ya sea creada por ella misma o por un tercero1;
- Opinión: la retroalimentación sobre el objetivo es importante, ya sea mediante métricas, datos o terceros1;
- Complejidad: Incluir múltiples tareas complejas dentro del mismo objetivo no es la solución. Es importante dividir las tareas más complejas en múltiples objetivos1.
Sin embargo, establecer metas también involucra nuestros valores personales. Estos guían nuestras decisiones, hábitos y comportamientos, y también nos ayudan a definir qué objetivos son realmente importantes. En otras palabras, si un objetivo no es relevante para el individuo, es poco probable que se le dé prioridad.
Según la Teoría de la Autoconcordancia, establecida por Sheldon y Elliot, los objetivos que reflejan valores personales son más importantes que aquellos basados en expectativas externas y presiones sociales. Estos objetivos aumentan la satisfacción y el bienestar, tienen mayor probabilidad de alcanzarse y, al evitar conflictos internos, reducen el estrés mental2.
Valores Personales y Claridad Mental
Si bien los valores personales actúan como filtro, también influyen en la claridad mental. Primero, porque ayudan a reducir la carga de las decisiones, ya que descartamos lo que no es compatible con nuestros valores, lo que nos reduce la indecisión3.
Ahora, al descartar lo incompatible, podemos centrarnos mejor en lo que realmente importa. En otras palabras, los valores también contribuyen a una mayor concentración. Dedicamos menos tiempo y energía a conflictos internos, intentando justificar una decisión que no se ajusta a nuestra brújula interna3.
Por ejemplo, cuando hablamos de objetivos profesionales, la psicología organizacional establece que cuando los valores personales y los objetivos profesionales están alineados, la concentración y el compromiso aumentan3.
En la práctica
Si una persona valora la familia, buscará establecer metas que se alineen con ella, como salir del trabajo a tiempo para recoger a sus hijos del colegio o reservar un día a la semana para dedicar tiempo de calidad a su familia.
Ahora bien, si el valor de una persona es el crecimiento personal, sus metas podrían incluir aprender una nueva habilidad, profundizar en el autoconocimiento o incluso realizar un curso de especialización para ampliar sus competencias profesionales.
Finalmente, si la autonomía es su valor principal, una meta alineada con esto sería emprender y ser su propio jefe, o buscar un modelo de trabajo que le permita mayor libertad.
Con estos ejemplos prácticos, resulta más fácil comprender que cuando nuestros valores son claros, nuestras metas también lo serán, porque filtramos todo el ruido que nos impide avanzar. Nuestras metas se vuelven más atractivas y alcanzables cuando tenemos claridad mental sobre lo esencial. De esta manera, eliminamos distracciones, reducimos el estrés y los conflictos internos, y ganamos motivación.
La claridad mental consiste en tomar mejores decisiones, siendo conscientes de quiénes somos y de lo que realmente importa.
1 – CARRIE, James. Locke and Latham´s Goal Setting Theory: Set Better Goals. PeopleShift, 2019. Disponible: https://people-shift.com/articles/locke-lathams-goal-setting-theory/. Acesso em: 11 ago 2025.
2 – SHELDON, K. M., & ELLIOT, A. J. (1999). Goal striving, need satisfaction, and longitudinal well-being: The self-concordance model. Journal of Personality and Social Psychology, 76(3), 482–497. https://doi.org/10.1037/0022-3514.76.3.482
3 – KRISTOF-BROWN, A. L., ZIMMERMAN, R. D., & JOHNSON, E. C. (2005). Consequences of individuals’ fit at work: A meta-analysis. Personnel Psychology, 58(2), 281–342.
