El autoconocimiento es una herramienta poderosa, saber reconocer nuestras fortalezas, debilidades y también nuestros límites, nos permite definir acciones alineadas con nuestros valores, para poder alcanzar nuestros objetivos y metas.
Por otro lado, la productividad es un tema recurrente en el mundo moderno, donde cada vez es más necesario anticipar acciones para mantenerse al día con las tecnologías y cambios que ocurren a diario en todo el mundo. Y es aquí cuando el autoconocimiento cobra aún más valor, en un universo tan competitivo.
Además, el autoconocimiento puede ayudar a evitar que la búsqueda constante de producir más provoque niveles exagerados de estrés, frustración, fatiga física y mental e incluso enfermedad1.
Por lo tanto, para mejorar tu productividad a través del autoconocimiento, necesitas identificar tus habilidades2: por ejemplo, a la hora de elaborar un plan de estudios, no juntes todos los temas con los que tienes dificultades en un mismo día. Distribuya estos temas a lo largo de la semana, emparejándolos con otros con los que se sienta más cómodo, porque aquello con lo que se sienta más cómodo le llevará menos tiempo, lo que le dejará una ventana más grande para concentrarse en lo que es más difícil.
Otro punto importante tiene que ver con tus preferencias2: por ejemplo, si prefieres trabajar desde casa, hoy es posible elegir vacantes laborales que ofrezcan esta flexibilidad. No todos somos iguales ni siquiera en este sentido, y muchos tienen más éxito trabajando en la oficina, mientras que a otros les va mejor trabajando desde casa.
También es fundamental conocer tus fortalezas y debilidades2. Durante la graduación te darás cuenta de que tienes más afinidades con ciertas áreas de la profesión que elegiste. Por eso, a la hora de buscar una vacante en el mercado laboral, es importante priorizar las vacantes que estén alineadas con tus fortalezas, por ejemplo.
También es importante saber plantearse metas alineadas con la realidad, y no plantearse metas inalcanzables que sólo generarán más estrés y ralentizarán su productividad. Y por último pero no menos importante está saber pedir ayuda y esto tiene mucho que ver con conocer realmente tus límites2. No somos perfectos, de hecho la perfección es algo muy subjetivo, y muchas veces nos abrumamos por miedo o vergüenza de pedir ayuda a alguien que entiende un poco más sobre un determinado tema. Pedir ayuda no es un signo de debilidad, todo lo contrario, es una señal de que te conoces lo suficiente como para no sobrepasar tus propios límites.
1 – LOHMANN, Marina. Autoconhecimento e Produtividade. Medium, 2024. Disponible en https://gambe-org.medium.com/autoconhecimento-e-produtividade-f8a0fc4c4ee1. Acesso em: 09 jan 2025.
2 – MOALLA, Yasmin. Autoconhecimento e produtividade. Greentable, 2023. Disponible en https://greentable.com.br/blog/autoconhecimento-e-produtividade?srsltid=AfmBOorBFY4Mp0fCw6vpo_wJ0TxOEuQ9knuesOchXzidQCj6kxQMlT_C. Acesso em: 10 jan 2025.